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lunes, 30 de enero de 2012

Tenis / Australia 2012: Rafa, casi, casi...


Este es el primer post sobre tenis, un deporte al que soy muy aficionado desde que tengo uso de razón pero del que he recopilado estadísticas desde hace muy poco tiempo, curiosamente. Y eso que, como es sabido, junto con el baloncesto es el deporte que más jugo le saca a esto de los números.
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Ayer domingo finalizaba el Abierto de Australia en su edición de 2012. Este campeonato, el primer "Grand Slam" de cada año, suele albergar muchas sorpresas dada su peculiar fecha en el calendario al inicio de la temporada, muy alejado del grueso de campeonatos principales como Roland Garros, Wimbledon o el Abierto de los Estados Unidos (o "US Open") Esta temporada, por contra, los principales ases de la raqueta se han puesto bien pronto las pilas y en sus cuadros principales apenas hay hueco para que jugadores de segunda fila asomen su nombre en las últimas eliminatorias. La principal de ellas ha sido el joven japonés Kei Nishikori que llegó hasta cuartos de final del cuadro masculino donde perdió con el escocés Andy Murray. También dio que hablar la prematura eliminación de Francesca Schiavone a manos de su compatriota Romina Oprandi en segunda ronda.

La otra gran sorpresa fue la no-victoria de la pareja formada por los gemelos Bob y Mike Bryan. En la final masculina de dobles se impuso la dupla Radek Stepanek (RCH) / Leander Paes (IND) por 6-7 (1-7) y 2-6, siendo protagonista el talentoso tenista hindú. En el "dobles" femenino se impuso la pareja rusa Kuznetsova-Zvonareva sobre la italiana Errani-Vinci por 5-7, 6-4 y 6-3.


María Sharapova felicita a Azarenka al final del encuentro
La final femenina fue el sábado y enfrentó a dos de las tenistas del circuito profesional con mayor fondo físico: la bielorrusa Victoria Azarenka y la rusa Maria Sharapova. Se esperaba una final larga y disputada, más cuando Sharapova comenzó el partido por delante, pero la Azarenka tomó el control del partido y apoyándose en su primer servicio terminó por sacar a María de la pista del Rod Laver en poco más de una hora y veinte minutos. A la bielorrusa le salió redonda la noche, pues su título del primer Grand Slam significaba estrenar el liderazgo del ranking WTA.

Victoria Azarenka, con el trofeo de campeona

Ficha de la final femenina:
Abierto de Australia 2012 if _f

En cuanto al torneo individual masculino, la mayoría de las principales estrellas no dieron su brazo a torcer y las semifinales acogieron a los cuatro cabezas de serie: Djokovic, Nadal, Federer y Murray. Las semifinales fueron intensas: Nadal volvió a vencer a su amigo y rival Roger Federer en un duro partido en cuatro sets (6-7 (5-7), 6-2, 7-6 (7-5) y 6-4), poco duro comparado con la otra semifinal entre Djokovic y Murray, decidida finalmente a favor del serbio por 6-3, 3-6, 6-7 (4-6), 6-1 y 7-5. Murray desperdició un 2-1 favorable y varios puntos que podían haberle dado la victoria y Djokovic no perdonó sus errores. A muchos les recordó la épica semifinal Nadal-Verdasco de hace tres años. Nadie se imaginaba que las cinco horas de la semifinal se verían ampliamente superadas en el último partido.

La final individual masculina enfrentaba a los dos principales cabezas de serie y suponía la posibilidad de revancha para Rafa Nadal tras las seis derrotas en finales a manos de Nole en 2011. Se preveía una final larga y dura, muy física y decidida en pocos detalles... y las expectativas se vieron superadas.


Si bien no fue el mejor partido entre ambos tenistas que se recuerde, hubo momentos de tenis brillante (puntos memorables de Rafa como el "banana shot" del primer set con 2-2 y ventaja, o voleas cruzadas en el 3º y el 4º set) Abundaron las alternativas de dominio y los estados cíclicos en ambos finalistas. Djokovic parecía verlo todo muy cuesta arriba tras el primer set... y Rafa estuvo cerca de tirar la toalla en el final del tercero. No en vano, cinco horas y cincuenta y tres minutos (repetimos: ¡¡¡cinco horas y cincuenta y tres minutos!!!) dan para mucho.

El final del tercer set mandó a los fans de Djokovic a poner el champán a enfriar, pero el cuarto set fue muy diferente. Gran nivel de juego y los dos contendientes dando el 100%. En el momento cumbre, con 6-6, Rafa hace la machada y rompe el servicio de Novak en el mejor momento posible, y a la primera. Empate a dos, un panorama completamente diferente al del final del anterior set y una quinta y última manga a vida o muerte. Conociendo la habilidad de Nadal para sacar adelante este tipo de encuentros, las apuestas estaban a favor del de Manacor.

Un momento de Rafa en plena remontada

Y más aún con la ventaja obtenida con su primer saque. Nadal parecía volver a encontrarse a gusto en el fragor de un partido maratoniano, de una finalísima a cara de perro frente a otro gran campeón como Djokovic. Rafa castigaba una y otra vez la derecha de Nole. Todo pareció decidirse en el momento en el que el español volvió a romper el servicio del serbio en su segundo intento y adelantarse por 4-2. En el siguiente juego, una volea aparentemente fácil, con Djokovic vencido hacia el lado contrario, pudo haber sido la puntilla... pero Rafa la falló por unos milímetros. La pelota salió al pasillo. Nole salió vivo del lance y como gran campeón que es, al rehacerse no tuvo piedad de su contrincante.

En pleno quinto set (4-4), con las raquetas en todo lo alto y con el público a un paso de la histeria, el intenso calor sufrido en Melbourne (unos 33ºC al comienzo del encuentro) se transformó en lluvia de medianoche. Diez minutos de "impasse" mientras el techo retráctil del Rod Laver se cerraba que enfriaron a Nadal y dieron aliento a Djokovic. El de Belgrado, en un apoteósico final de partido, consiguió completar la remontada: 5 juegos a dos a su favor para terminar 7-5, certificando en su primer "match ball" su quinto título de Grand Slam.

Novak Djokovic posa con la copa de campeón del Abierto de Australia

Ficha de la final masculina:
Abierto de Australia 2012 Im _f

Después de casi seis horas de partido da mucha rabia perder, es como nadar y morir en la orilla. Aún así, Rafa manifestó al final del encuentro encontrarse satisfecho por recuperar su óptimo nivel de juego y que incluso esta derrota fue la menos dolorosa para él, pues le ha quedado la conciencia tranquila de quien lo da absolutamente todo para ganar y que le ganaba el actual número uno. Djokovic también fue cortés con su rival: "deberíamos ganar los dos pero sólo puede ganar uno". Las perspectivas para los próximos grandes torneos son muy optimistas para el mallorquín. Su pico de forma empieza en mayo y el nivel demostrado en este Abierto de Australia vuelve a ser el del Rafa que todos conocemos.

Rafa al saque, Nole al resto

Para finalizar, un dato curioso: De 134 partidos disputados en torneos de "Grand Slam", Rafael Nadal sólo ha perdido ¡dos! una vez que ha ganado el primer set. El único antecedente a la final de ayer fue la derrota ante David Ferrer en octavos del Abierto de los Estados Unidos de 2007, en octavos de final.

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