
Uno de los proyectos más ambiciosos con respecto al blog que tengo en mente –y que, de hecho, ya estaba comenzando a moldear- era una serie sobre la historia del Real Oviedo para dar a conocer el fecundo pasado que tiene el equipo del que soy seguidor, que un día fue de los más grandes de España y que hoy deambula por las categorías semi-profesionales de nuestro fútbol en busca del camino de vuelta a casa cual Ulises hacia su Ítaca. Mi proyecto se apoyaría en una serie de capítulos que comprenderían un período de cinco, siete o diez años, contando las idas y venidas del club y sus circunstancias a través de sus ya ochenta y seis años de historia.
Pero la actualidad manda, y en estos mismos momentos, esa historia que pienso contarles puede tener un triste final si el próximo sábado 17 de noviembre el Real Oviedo no cubre en esta segunda fase de la ampliación de capital los 1.905.000€ necesarios para evitar la liquidación de la sociedad anónima deportiva en el que se ha constituido desde 1992, lo que supondría la muerte del club azul. En este segundo período de la ampliación de capital, abierto desde el pasado sábado 3 al público en general, se está viviendo una auténtica revolución oviedista principalmente a través de las llamadas “redes sociales” que está llevando el desesperado grito de socorro “S.O.S. Real Oviedo” a los confines del mundo y que para sorpresa de propios y extraños está teniendo eco en los cinco continentes.